27/7/10

EL Poder de la Oración

La oración purifica nuestro caminar con Jesús, es el camino por donde caminamos a la perfección; y la oración es pura cuando oramos con sinceridad.
“Por eso les digo: todo lo que pidan en la oración, crean que ya lo han recibido y lo obtendrán” (Marcos 11,24)

La oración, cuando es autentica como la que Jesús nos enseño y práctico, brota de una fe viva, la expresa y la alimenta. Toda nuestra vida cristiana ha de ser oración y dialogo con Dios a nivel persona
La oración cristiana es una oración centrada en Jesús, lugar de encuentro con Dios. Cuando oramos a Jesús y ponemos en el toda nuestra confianza, sentimos que su espíritu es quien ora en nuestro interior; porque el espíritu ora sin cesar en el fondo de nuestra alma.

La oración es la fuerza que nace de nuestra fe. Es la fuerza que surge del amor. Es la fuerza que se pone en pie de la esperanza. La oración es un encuentro, un encuentro con Dios. Orar es sencillamente llamarle a Dios con el corazón: ¡Padre!

La oración es el poder de Dios, la fuerza de Dios en la debilidad del hombre, es un don que necesita ser cultivado. Cuando florece, la vida se vuelve bella y los problemas tienen salida, porque desde Dios tienen respuesta. La oración Sana, cura.
La oración cicatriza las heridas. La oración es capaz de poner en pie la vida más derrumbada. Oración es respirar. Orar es amar, orar es vivir en Dios y para Dios.

La oración nos permite sentir a Dios por medio del Espíritu Santo y agradecerle por las bendiciones recibidas.

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23/7/10

Empujar la Roca

Evangelio según San Juan 15,1-8.

 Yo soy la verdadera vid y mi Padre es el viñador.
El corta todos mis sarmientos que no dan fruto; al que da fruto, lo poda para que dé más todavía.

Ustedes ya están limpios por la palabra que yo les anuncié.
Permanezcan en mí, como yo permanezco en ustedes. Así como el sarmiento no puede dar fruto si no permanece en la vid, tampoco ustedes, si no permanecen en mí.
Yo soy la vid, ustedes los sarmientos. El que permanece en mí, y yo en él, da mucho fruto, porque separados de mí, nada pueden hacer.

Pero el que no permanece en mí, es como el sarmiento que se tira y se seca; después se recoge, se arroja al fuego y arde.
Si ustedes permanecen en mí y mis palabras permanecen en ustedes, pidan lo que quieran y lo obtendrán.
La gloria de mi Padre consiste en que ustedes den fruto abundante, y así sean mis discípulos.

"Nunca dejes de empujar"

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19/7/10

Jesús Yo Confio En Ti

El apego nos causa vacio

Tiene el habito de juntar y guardar objetos que considera ya no son útiles, creyendo que un día, podrá necesitar de ellos?
Tiene el hábito de juntar dinero solo para no gastarlo, pues piensa que en el futuro le podrá hacer falta?
Tiene el habito de guardar ropa, zapatos, muebles, utensilios domésticos, libros, bicicletas, camas, y otras cosas del hogar que ya no usa hace bastante tiempo, inclusive muchas cosas nuevas que no decidió utilizar..?

Y dentro suyo...? Usted tiene el habito de guardar broncas, resentimientos, tristezas, miedos, falta de desprendimiento, egoísmos, egos, etc.?

No haga eso. Es anti-prosperidad.
Es preciso crear un espacio, un vacio, para que el amor de Dios y las cosas nuevas lleguen a su vida.
Es preciso eliminar lo que es usted ya no utiliza en su vida, para que la prosperidad venga.
Es la fuerza de ese vacio que absorberá y atraerá todo lo que usted desea.

Mientras usted esta material o emocionalmente cargando cosas que ya considera que no lo son útiles, no habrá espacio abierto para nuevas oportunidades.

Todo en la vida debe circular. Saque la Ropa, los zapatos, los juguetes, limpie los cajones, los armarios, el garaje. Ya que lo que usted no usa o no considera útil, otro necesitado lo desea, tal vez para calmar el frio en la noche, para no pisar las frías calles que habita, o tal vez sea el único juguete con el que un niño tendrá la oportunidad de jugar, abrase al mundo, regale, sea generoso, muestre a través de usted que Dios existe, acérquese al mas necesitado, demuéstrele a la vida que usted cree en Dios, devuelva de lo mucho que ha recibido y Dios le devolverá el doble que de lo que ha decidido desprenderse.

La actitud de guardar un montón de cosas que tal ves para nosotros no sean útiles a pesar de que se pueden utilizar, amarran nuestras vidas.
No son las cosas guardadas las que estancan su vida, sino el significado de la actitud de guardar y no compartir con los más pobres, perderse de compartir con el más necesitado.
Cuando se guarda, se considera la posibilidad de falta, de carencia de fe puesta en Dios que todo lo provee, Es creer que mañana podrá faltar, y usted no tendrá medios de proveer sus necesidades.

Con esa postura, usted esta asumiendo actitudes de poca fe en Dios para su vida y su corazón:

1º Usted cree en Dios, pero no le cree que pueda manejar sus cosas y darle lo que necesita.
2º Usted cree que lo mejor NO es para usted, ya que se alegra con guardar cosas que usted ya no necesita pero que pueden ser útiles para otras personas, Recuerde Todos los días Dios renueva la vida, nos da la oportunidad de ver un nuevo amanecer y empezar de nuevo.

Así como manejamos lo material, manejamos lo espiritual y no dejamos entrar a Dios en nuestra vida y corazón para que saque todas las cosas viejas que hemos guardado por tanto tiempo y lo renueve con cosas nuevas, no podremos alivianar la carga que día a día vamos acumulando, y a pesar de tener la despensa llena, tenemos hambre, y cada vez nos sentimos mas solos

Si nosotros nos encargamos de las cosas de Dios aquí en la Tierra, el se encargara de nuestras cosas desde el cielo”

14/7/10

HE VUELTO A NACER



El poder del saber dar

Ser misericordioso es volcar un poco de dulzura en el corazón amargado, comunicarles nuevas fuerzas para ir escalando en el camino del deber.

“Sean compasivos, como es compasivo el padre de ustedes”( Lucas 6,36)

“felices los misericordiosos, por que tendrán la misericordia”. La misericordia es fruto de un corazón tierno y compasivo, que sabe sufrir con los que sufren, llorar con los que lloran y afligirse con los que tienen alguna pena.

Pues bien, Dios me ha permitido experimentar la misericordia y he visto la dura realidad de otros, sensibilizándome, los más importante, entendiendo que la vida y mis problemas eran tan insignificantes, que por el contrario tenía mucho que dar, era tanto lo que Dios me había dado que no me permitía entender que con tal abundancia existieran personas que carecían de todo, inclusive solo pedían un abrazo como las niñas de un Internado, que a tan corta edad ya habían experimentado todos los sufrimientos que podía padecer un ser humano, sin padres, familia, en algunos casos violadas, viviendo de la caridad de las personas y con un futuro totalmente incierto, pero sin embargo, a pesar de esta tragedia, se les veía reír, jugar, tal vez con recuerdos tristes, pero sin odio ni rencor.

El sentimiento, la amargura de la indiferencia no podían ser peor al Dios permitirme ver en los ojos de una niña, la cruel realidad, que pena tan grande sentí. Donde había estado todos estos años cuando pude haber hecho muchas cosas en favor de los más necesitados, la respuesta era muy simple vivía en el tiempo del hombre, donde el egoísmo, la mezquindad, la ambición de tener siempre lo mejor, olvidando totalmente el que esta al lado.

Pero cuando se vive en el tiempo de Dios, el nos permita ver las verdaderas tragedia de los demás seres humanos, dándonos la oportunidad de ver en cada una de esas tragedias su rostro, podemos ver claramente todo lo que tenemos, y con el solo hecho de dar nos libera de nuestra propia tragedia, la angustia de la indiferencia y en vez del vacío nos da la gracia de remplazarlo por la satisfacción plena que solo se goza cuando se da tan solo un poquito de lo que tenemos, que para otros es la diferencia de poder comer siquiera una vez al día, o sentirsecomo una persona querida tan solo por 1 minuto.

“En la vida hay gente tan pobre tan Pobre que lo único que tiene es Dinero”

10/7/10

EL HIJO PRODIGO-Padre Edgar Larrea



No son los santos los que necesitan el medico, si no los enfermos. No he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores (Marcos 2,17)

El corazón de Jesús fue siempre sin odios, rabias, venganzas y envidias, siempre casa abierta al que llegase. Nuca puso en su lista a enemigos. Ni apunto la deuda a nadie.

La mansedumbre y la dulzura desterraron de su corazón la violencia, nunca ataco, no hirió, ni maltrato a nadie, siempre supo disculpar, ver el lado positivo de cualquier situación.
El perdón es lo fundamental de la caridad. Es capaz de perdonar al creyente cuando antes ha experimentado el perdón del padre dado por medio del Cristo crucificado.

Por medio de La parábola del hijo prodigo Jesús nos muestra que a pesar de habernos alejado de el, siempre nos estará esperando para perdonar nuestros pecados y darnos la felicidad que solo la pueda dar Dios, y llenar esos vacíos que en muchas ocasiones nos ahogan y nos no dejan disfrutar todo lo que el creador nos ha dado de este paraíso.

HIJO PRODIGO



La confianza en la oración Mt 7, 7-12

Pedid y se os dará; buscad y encontrareis; llamad y se os abrirá, porque todo el que pide, recibe; y el que busca encuentra, y al que llama, se le abrirá. ¿O abra entre vosotros alguno a quien su hijo le pide pan y le da una piedra? ¿Si pide un pez le da una serpiente? Si vosotros, siendo malos, sabéis dar dones buenos a vuestros hijos, ¿con cuanta más razón vuestro padre, el de los cielos, dará cosas buenas a los que le piden?

Todo lo que queráis que hagan los hombres con vosotros, hacedlo así vosotros con ellos. Porque esta es la ley de los profetas.