27/7/11

Encontrando el Tesoro Escondido

 
Evangelio según San Mateo 13,44-46.
El Reino de los Cielos se parece a un tesoro escondido en un campo; un hombre lo encuentra, lo vuelve a esconder, y lleno de alegría, vende todo lo que posee y compra el campo. El Reino de los Cielos se parece también a un negociante que se dedicaba a buscar perlas finas; y al encontrar una de gran valor, fue a vender todo lo que tenía y la compró.
Extraído de la Biblia, Libro del Pueblo de Dios.
Reflexión del Santo Evangelio

La vida es un camino que tiene un final, en el tiempo que dura ese camino nos pasamos buscando el tesoro escondido, la perla preciosa, pero buscamos no en el reino de Dios, si no en el reino que hemos creado nosotros los hombres, un Reino basado en lo material, es por eso que nuestro tesoro escondido o la perla preciosa están en jugar a la lotería, obtener más y más dinero, las mejores casas, los mejores carros, las mejores posiciones sociales, adoramos el cuerpo hasta el punto de invertir mucho dinero para transformarlo a costa a veces de nuestra misma salud, este es el reino de los hombres, un reino efímero, que causa satisfacciones momentáneas, pero que el resultado final es un Reino que solo le causa vacíos al hombre.

Cuando encontramos la perla preciosa el tesoro escondido en el Reino de Dios, la situación es totalmente diferente, empezamos a renunciar a las cosas del mundo que solo llenan la parte material y cambiamos al gozo, felicidad y plenitud que solo nos puede provocar Dios, ya no nos hace falta nada, nos sentimos plenamente llenos espiritualmente.

Es muy común escuchar gente famosa y adinerada con una vida vacía y enredada en drogas, alcohol que termina suicidándose, el único motivo de su suicidio era tenerlo todo, solo le faltaba Dios, que es el que le da sentido a la vida, desafortunadamente no lograron encontrar el verdadero tesoro escondió esa perla preciosa. Amen



25/7/11

Y Siempre Queremos ser Servidos


Evangelio según San Mateo 20,20-28.
Entonces la madre de los hijos de Zebedeo se acercó a Jesús, junto con sus hijos, y se postró ante él para pedirle algo. "¿Qué quieres?", le preguntó Jesús. Ella le dijo: "Manda que mis dos hijos se sienten en tu Reino, uno a tu derecha y el otro a tu izquierda". "No saben lo que piden", respondió Jesús. "¿Pueden beber el cáliz que yo beberé?". "Podemos", le respondieron. "Está bien, les dijo Jesús, ustedes beberán mi cáliz. En cuanto a sentarse a mi derecha o a mi izquierda, no me toca a mí concederlo, sino que esos puestos son para quienes se los ha destinado mi Padre".
Al oír esto, los otros diez se indignaron contra los dos hermanos.
Pero Jesús los llamó y les dijo: "Ustedes saben que los jefes de las naciones dominan sobre ellas y los poderosos les hacen sentir su autoridad. Entre ustedes no debe suceder así. Al contrario, el que quiera ser grande, que se haga servidor de ustedes; y el que quiera ser el primero que se haga su esclavo: como el Hijo del hombre, que no vino para ser servido, sino para servir y dar su vida en rescate por una multitud".
Extraído de la Biblia, Libro del Pueblo de Dios.
Reflexión del Santo Evangelio

El hombre siempre ha considerado su grandeza en obtener poder, en conseguir cosas y ser servido, nos centramos en nuestras propias necesidades y enfocamos nuestras vidas a llenar cada una de esas necesidades. A la luz de la vida y los ojos de Dios no es malo que nos preocupemos por nuestro bienestar con sus necesidades, pero el pecado que cometemos es volvernos egoístas, olvidándonos de servir y compartir también con los demás, alcanzamos la grandeza solo para nosotros y no compartimos parte de esa grandeza con los más necesitados.

Siempre queremos ser los primeros, cuanto nos cuesta quedarnos en ocasiones de últimos para darle la mano a esos que nunca podrán estar de primeros, no queremos compartir nada de lo que tenemos, y cuando regalamos, damos lo que ya no sirve o nosotros ya no lo podemos usar, ojala así sea una vez en nuestra vida hiciéramos lo que hizo Jesús toda su vida “ el Hijo del hombre, que no vino para ser servido, sino para servir y dar su vida en rescate por una multitud".  




21/7/11

Por mas que Oigan No Escuchan

Evangelio según San Mateo 13,10-17.
Los discípulos se acercaron y le dijeron: "¿Por qué les hablas por medio de parábolas?". Él les respondió: "A ustedes se les ha concedido conocer los misterios del Reino de los Cielos, pero a ellos no. Porque a quien tiene, se le dará más todavía y tendrá en abundancia, pero al que no tiene, se le quitará aun lo que tiene. Por eso les hablo por medio de parábolas: porque miran y no ven, oyen y no escuchan ni entienden.
Y así se cumple en ellos la profecía de Isaías, que dice: Por más que oigan, no comprenderán, por más que vean, no conocerán, Porque el corazón de este pueblo se ha endurecido, tienen tapados sus oídos y han cerrado sus ojos, para que sus ojos no vean, y sus oídos no oigan, y su corazón no comprenda, y no se conviertan, y yo no los cure. Felices, en cambio, los ojos de ustedes, porque ven; felices sus oídos, porque oyen. Les aseguro que muchos profetas y justos desearon ver lo que ustedes ven y no lo vieron; oír lo que ustedes oyen, y no lo oyeron.
Extraído de la Biblia, Libro del Pueblo de Dios.

 Reflexión del Santo Evangelio

Miramos pero no Vemos, oímos pero no escuchamos ni entendemos” cuanto nos cuesta ver, escuchar y entender a pesar de mirar y oír, ¿pero que miramos y oímos? - Miramos como la familia cada vez se destruye y al destruirse los hijos se pierden en la droga, los vicios, el aborto, la prostitución el homicidio; miramos como dada vez nuestros jóvenes se pierden a temprana edad, ya no llegan  ni siquiera a vivir  la adolescencia porque sus vidas son tan cortas, bien sea por que son asesinados, se suicidan, llegan a las cárceles, o simplemente los esclaviza el vicio, especialmente alcohol y las drogas. No queremos ver esta realidad:, en otros tiempos la gente se moría de vieja, ahora la muerte cada vez es más joven.

Oímos que en el mundo cada vez se hace más difícil vivir, la falta de alimento mata cada vez más gente en el mundo especialmente en áfrica. El clima cambia, el mar ya sale a las ciudades arrasando y acabando con todo a su paso, en Japón mas diez mil personas muertas, los terremotos también hacen su parte acabando con miles de vidas humanas a su paso, Haití fue la muestra más reciente que el Mundo está gritando para que ya no lo oigamos si no que lo escuchemos. El evangelio de hoy es muy claro, el hombre en su afán de poder, encerrado en su egoísmo, apegados a las cosas materiales, se ha olvidado de Dios y poco a poco va cavando su propia tumba sin importarle que sean sus propios hijos que está enterrando en ellas.


“Y así se cumple en ellos la profecía de Isaías, que dice: Por más que oigan, no comprenderán, por más que vean, no conocerán, Porque el corazón de este pueblo se ha endurecido, tienen tapados sus oídos y han cerrado sus ojos, para que sus ojos no vean, y sus oídos no oigan, y su corazón no comprenda, y no se conviertan, y yo no los cure.”  Mateo 13, 10-17



18/7/11

Y seguimos pidiendo Señales y Signos

Evangelio según San Mateo 12,38-42.
Entonces algunos escribas y fariseos le dijeron: "Maestro, queremos que nos hagas ver un signo". Él les respondió: "Esta generación malvada y adúltera reclama un signo, pero no se le dará otro que el del profeta Jonás. Porque así como Jonás estuvo tres días y tres noches en el vientre del pez, así estará el Hijo del hombre en el seno de la tierra tres días y tres noches. El día del Juicio, los hombres de Nínive se levantarán contra esta generación y la condenarán, porque ellos se convirtieron por la predicación de Jonás, y aquí hay alguien que es más que Jonás.
El día del Juicio, la Reina del Sur se levantará contra esta generación y la condenará, porque ella vino de los confines de la tierra para escuchar la sabiduría de Salomón, y aquí hay alguien que es más que Salomón.
Extraído de la Biblia, Libro del Pueblo de Dios.


 Reflexion del Santo Evangelio
Cuantas veces no hemos escuchado la historia de Jonás, quien fue tragado por una ballena y posteriormente después de tres días fue liberado por el mismo pez, el evangelio de hoy habla acerca de la facilidad de conversión de los hombres por la predicación de Jonás en aquellos tiempos.
                                                
Y hoy nos cuestiona a nosotros quienes no creímos en uno más grande que Jonás, y ese fue Jesús el hijo de Dios quien estuvo tres días y tres noches en el seno de la tierra, nuestra generación no ha creído en él, estamos reclamado más signos para poder creer en Dios, no nos basta la crucifixión, muerte y resurrección de Jesús,  no nos hemos dado cuenta que el tiempo se acaba y el día del juicio está muy cerca.

Que el único signo que le pidamos a Dios para creer en él sea su misericordia antes de pasar a rendirle cuentas en la otra vida. Amen

12/7/11

Se Necesita un Milagro?


Evangelio según San Mateo 11,20-24.
Entonces Jesús comenzó a recriminar a aquellas ciudades donde había realizado más milagros, porque no se habían convertido. "¡Ay de ti, Corozaín! ¡Ay de ti, Betsaida! Porque si los milagros realizados entre ustedes se hubieran hecho en Tiro y en Sidón, hace tiempo que se habrían convertido, poniéndose cilicio y cubriéndose con ceniza. Yo les aseguro que, en el día del Juicio, Tiro y Sidón serán tratadas menos rigurosamente que ustedes.
Y tú, Cafarnaún, ¿acaso crees que serás elevada hasta el cielo? No, serás precipitada hasta el infierno. Porque si los milagros realizados en ti se hubieran hecho en Sodoma, esa ciudad aún existiría. Yo les aseguro que, en el día del Juicio, la tierra de Sodoma será tratada menos rigurosamente que tú".
Extraído de la Biblia, Libro del Pueblo de Dios.


“El que se le da más, se le exigirá más” Dios nos da todo y sin embargo, no valoramos cada cosa que tenemos, siempre estamos renegando por el medio vaso de agua que falta y no por el medio vaso que nos queda, pero lo más grave aún, renegamos de las personas que Dios nos ha dado para compartir nuestras vidas, esposo(a), Novio(a), hijos, padres, amigos, a veces nos cuesta aceptar que cada persona que Dios nos coloca a nuestro lado es una bendición, inclusive a veces renegamos hasta de nosotros mismos.

Entre más milagros obra Dios en nuestras vidas y más nos bendice menos queremos volvernos a él y convertirnos a su palabra, nuestra sagacidad nos lleva a pensar que todo es obra de nosotros mismos, nos volvemos tan autosuficientes, que nos olvidamos de la mano, que nos da Dios en nuestras vidas.

Que el siguiente milagro que se produzca en nuestras vidas, sea el nosotros disminuir para que Dios crezca en cada uno de nosotros. Amen




6/7/11

Tenemos el Poder de Curarnos

Evangelio según San Mateo 10,1-7.


Jesús convocó a sus doce discípulos y les dio el poder de expulsar a los espíritus impuros y de curar cualquier enfermedad o dolencia. Los nombres de los doce Apóstoles son: en primer lugar, Simón, de sobrenombre Pedro, y su hermano Andrés; luego, Santiago, hijo de Zebedeo, y su hermano Juan; Felipe y Bartolomé; Tomás y Mateo, el publicano; Santiago, hijo de Alfeo, y Tadeo; Simón, el Cananeo, y Judas Iscariote, el mismo que lo entregó.

A estos Doce, Jesús los envió con las siguientes instrucciones: "No vayan a regiones paganas, ni entren en ninguna ciudad de los samaritanos. Vayan, en cambio, a las ovejas perdidas del pueblo de Israel. Por el camino, proclamen que el Reino de los Cielos está cerca.

Extraído de la Biblia, Libro del Pueblo de Dios.

Reflexión del Santo Evangelio

El poder de transformar vidas viene de Dios, ese poder solo lo obtenemos cuando como los doce apóstoles decidimos seguir a Jesús, obtenemos el poder de curarnos, sanarnos de cualquier enfermedad o dolencia, especialmente de aquellas que son del Alma y el espíritu y no las cura el hombre como: el resentimiento, odio, rencor, egoísmo, vanidad, ira, egocentrismo, orgullo, idolatría a nuestro cuerpo, todas estos males del espíritu son los culpables de nuestra infelicidad y nuestros vacios.

De acuerdo al evangelio somos las ovejas perdidas, por que decidimos vivir bajos los preceptos del mundo. Un mundo que le da más importancia a las cosas exteriores materialistas y se ha olvidado que también somos seres espirituales que necesitamos ser alimentados con la palabra de Dios, la Oración, la eucaristía, la reconciliación y la comunión con Dios. Pidamos a Dios que nos regale el don de curarnos no solo a nosotros sin no a todos aquellos que necesitan saber de él y conocerlo. Amen